Es momento de mimar a la viña, pues nos encontramos en unos meses en los que la temperatura, la humedad y la iluminación son determinantes en el desarrollo de las enfermedades de la vid, como lo es el oídio y el mildiu.
Si nos remontamos años atrás, el oídium, considerada como la primera enfermedad criptogámica de la viña, es originaria de Norte América y recibe el nombre de Oidium tuckerii (anamorfo) o Uncinula/Erysiphe necátor (Teleomorfo). Una enfermedad cuya primera presencia se alertó en Londres en 1845, propagándose por el resto de Europa y provocando de forma generalizada un fuerte descenso de la producción y de la calidad del vino. (publicación PIQUERAS HABA, Juan. El oidium en España: la primera gran plaga americana del viñedo. Difusión y consecuencias. 1850-1870. Scripta Nova. Revista Electrónica de Geografía y Ciencias Sociales). Así, tal y como describe dicha publicación, “en el caso de la viticultura se sabe que, bajo determinadas condiciones de calor y humedad, hay riesgo de plagas de oídio y de mildiu, y actualmente se adoptan las medidas preventivas para evitar su desarrollo y propagación”.
Algunas de las medidas más comunes para proteger a las vides de este problema son el uso del azufre y el cobre, tanto espolvoreados como en forma de polvo mojable.
Si bien estas medidas son efectivas, tienen algunos inconvenientes, como:
- Crean una película protectora sobre la planta que se lava con la lluvia, lo que causa, por un lado, que se pierda el efecto cuando llueve, y por otro que se contamine el suelo (sobre todo por el cobre).
- El azufre, si se dan altas temperaturas e índices UV, puede causar quemaduras en la planta, sobre todo en los frutos expuestos a la luz.
- Si se abusa de ellos, podemos encontrar, sobre todo, sulfitos en el fruto, que pueden no ser deseables si están en exceso.
Fytovacuna para prevenir el oídio y mildiu en la viña
En LIDA Plant Research hemos desarrollado un fungicida de acción sistémica (SAR) para oídio y mildiu en cultivo ecológico, la fitovacuna vegetal Fytosave®. Con su uso, lo que se logra es reducir hasta al 50% el cobre y el azufre en tratamientos de prefloración.
Se trata de una única estrategia certificada como ecológica de acción sistémica y persistente. Se mantiene hasta 15 días en planta: ni se lava, ni se pierde, ni contamina y es ideal para mezclar con azufre a bajas dosis.
Fytosave®, fitovacuna vegetal con registro fitosanitario
Fytosave es la fitovacuna vegetal registrada para control del oídio en solanáceas y cucurbitáceas bajo invernadero con Registro Fitosanitario por la normativa 1107/2009 en Europa. Se trata de un producto aprobado bajo reconocimiento mutuo en España como fitosanitario para control de oídio y mildiu en uva de mesa y vid de vinificación para la prevención de estas enfermedades, y además con la capacidad de mejorar parámetros relacionados con la calidad y poscosecha de estos cultivos.
Las fitovacunas vegetales ejecutan la acción de “engañar” a la planta y ésta, como respuesta, cree que está siendo atacada por un patógeno. La consecuente actuación de la planta es activar una serie de rutas genéticas y metabólicas para poder defenderse, minimizando y retrasando la aparición y virulencia de las enfermedades. Una vez la planta se somete a este proceso, está mucho más preparada para soportar las amenazas reales, evitando el uso de herramientas químicas y, por tanto, reduciendo los residuos.
Ese tema de tipo de productos es muy bueno, ahora es muy perseguidos este tipo de productos, solo que no sean muy caros, porque el pequeño productor que no exporta y que es de un mercado pequeño, si los acepta, solo que no afecte su lado económico,