“Puede parecer que aún tenemos tierra de sobra, y agua de sobra”, pero… Estas son las palabras de Kostas Stamulis, director general de la FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura), tras presentar su último informe, el cual plantea el desafío en el que nos encontramos: Saber si siguiendo el rumbo actual, en 2050 la Tierra dará de sí para alimentar a los casi 10.000 millones de personas que la habitarán.
Así lo advierte el documento presentado por la FAO El futuro de la alimentación y la agricultura: tendencias y desafíos: “Casi la mitad de los bosques que en tiempos cubrieron la Tierra –se asegura- han desaparecido. Las fuentes de agua subterránea se están agotando rápidamente. La biodiversidad ha resultado seriamente dañada”. Dadas estas afirmaciones extraídas por el informe, el Director General de la FAO, José Graziano da Silva, señaló que “los límites del planeta pueden verse superados de construir las tendencias actuales”.
Según pronostica el documento, en 2050 rozaremos los 10.000 millones de personas en el planeta, un aumento que se traducirá en una mayor demanda mundial de productos agrícolas, un 50% más sobre los niveles actuales, sumado a una mayor presión sobre los recursos naturales, que actualmente ya se encuentran en proceso de escasez. A su vez, se prevé la siguiente ecuación:
Consumo menor de cereales + Incremento de consumo de carne, frutas, hortalizas y alimentos procesados a mayor presión = más deforestación, degradación de la tierra y emisiones de gases de efecto invernadero.
Dado este contexto, el informe remarca la necesidad de tomar cartas en el asunto y plantea lo siguiente: “Si los sistemas alimentarios del planeta son capaces de producir alimentos suficientes para hacerlo, y de manera sostenible, pero aprovechar ese potencial –y asegurar que toda la humanidad se beneficie de ello- requerirá profundas transformaciones”.
¿Qué podemos hacer? Más con menos
El principal reto sacado a relucir es producir más con menos. Nosotros nos remitimos a las declaraciones de nuestros Ingenieros Agrónomos que en en su día, ya advirtieron de tal futuro. “La superficie no crece al mismo ritmo que la población. En menos terreno por persona, tendremos que hacer más alimento”, expuso Carlos León, Ingeniéro Agronomo de LIDA Plant Research.
Lo que se deja ver es que hay que cambiar el rumbo hacia sistemas más sostenibles. La buena noticia es que muchas partes del sector agroalimentario ya están sumando esfuerzos para ello, como apostando por la educación, pues la demanda de técnicos agrícolas es una realidad.
Para concluir, el informe identifica 15 tendencias y 10 desafíos que afectan a los sistemas alimentarios mundiales:
